
-
Arquitectos: Javier Terrados Estudio de Arquitectura
- Área: 921 m²
- Año: 2023

Descripción enviada por el equipo del proyecto. Casi sin quererlo, sin saberlo, seguimos construyendo casas romanas. Como los antiguos patricios que, acabadas las guerras púnicas, se instalaban lejos de su tierra en los cerros de Itálica o Baelo Claudia, habitando villas de generosa extensión, una familia centroeuropea vino a vivir frente a un campo de golf entre los alcornocales de San Roque.


Aquí también la arquitectura se extiende para dar forma a la mayor parte de la parcela. También aquí se ubican los recintos más públicos frente a la calle, resguardando la intimidad de la domus familiar, ahora no con tiendas o panaderías sino con sus modernas alternativas: estudio de pintura, gimnasio, oficina y sala de cine. Y también aquí se organiza la composición general con un sistema de patios dispuestos a lo largo de un eje. El primero, más reducido y cercano a la entrada, a modo el atrio de acceso, con su propio impluvium. El segundo, un peristilo actual, todo lo amplio que la parcela permite, abarcando la vegetación, las vistas al campo de golf y un estanque central, en este caso nadable.

La relación con la privacidad y las vistas se resuelve de forma radical. La casa se cierra a la calle y muestra sólo un muro ciego. Un modesto recodo configura el acceso, evitando las vistas al primer patio. En contraste, en el moderno peristilo la construcción se abre completamente al interior ajardinado de la parcela y a las vistas del entorno arbolado. El respeto a los alcornoques existentes da las pautas del despliegue de la arquitectura.



En el centro simbólico de la vivienda no tendremos la llama sagrada del hogar ardiendo en el atrio, pero sí el fuego tecnológico de la casa burguesa, la cocina, monumentalizada, envuelta en vidrio, y exhibida al visitante y al paisaje.

No edificamos con mampostería o ladrillos romanos, pero podemos emplear su versión tecnológica, el material pétreo de nuestra era, el hormigón armado, que aquí se quiere visible, expuesto, en la expresión de su materialidad, lo más cercano a la piedra que nuestra tecnología puede conseguir, bien en su modalidad "in situ" (cara interior) o prefabricada (cara exterior). Entre ambas hojas independientes se dispone el aislamiento de lana de roca que garantizas las máximas prestaciones de eficiencia energética. La exhibición del hormigón crudo en la envolvente colabora al aire de intemporalidad de la construcción.
