IR Arquitectura, no es solo un estudio, si no que se define como una plataforma de exploración que integra la práctica arquitectónica con temas tangenciales, como la ciudad, el paisaje, la tecnología y la sustentabilidad. Fundado por Luciano Intile y Enrico Cavaglià, con base en Buenos Aires, Argentina, IR arquitectura es un colectivo interdisciplinario formado por arquitectos, diseñadores y profesionales de diversas áreas, que abordan proyectos de diferentes escalas y naturalezas, aprovechando cada oportunidad para explorar nuevas soluciones y estrategias en lo que refiere al habitar contemporáneo, urbano y en estrecha relación con el entorno.
CityMakers, la comunidad global de arquitectos que aprenden de ciudades modelo y de sus “makers”, está trabajando con Archdaily para publicar una serie de artículos sobre Barcelona, Medellín y Róterdam. Sus autores son los propios arquitectos, urbanistas y/o estrategas de los proyectos que han transformado estas tres ciudades y que se estudian en las “Escuelas de Ciudades” y “Cursos-Documentales” realizados por CityMakers. En esta ocasión, Alejandro Restrepo Montoya, Director de Urbanismo y Arquitectura de Medellín, nos presenta su artículo “El urbanismo ambiental y las geografías urbanas, Medellín 2024-2027”
El plan urbano de Medellín se centra en responder cómo la planificación urbana puede mejorar la calidad de vida de las personas. Al desarrollar su propuesta, la ciudad está potenciando los beneficios sociales que estas prácticas urbanísticas pueden generar. Medellín hace énfasis en la utilización de sus condiciones naturales y ambientales tales como el valle, las quebradas, el río, las montañas y los cerros, para desarrollar criterios de planificación urbana que aborden las necesidades sociales.
La búsqueda de una ciudad ideal ha sido durante mucho tiempo un tema de debate entre profesionales de la arquitectura y el urbanismo. Además de la identidad estética y el patrimonio cultural, la calidad de vida en cada ciudad representa quizás el aspecto más importante en esta búsqueda. Este año, la Economist Intelligence Unit (EIU), una empresa hermana de The Economist, ha publicado su Índice de Habitabilidad Global 2024, destacando las ciudades que sobresalen en esta investigación en curso. Por tercer año consecutivo, Viena fue clasificada como la ciudad más habitable del mundo. Las ciudades europeas como Copenhague, Zúrich y Ginebra también ocupan un lugar destacado, lo que se atribuye a sus poblaciones más pequeñas, contribuyendo a menores tasas de criminalidad y una menor congestión. En comparación con el ranking del 2023, las cifras de las ciudades de América del Norte y Australia se han visto arrastradas a la baja por la actual crisis inmobiliaria.
La evaluación clasifica 173 ciudades de todo el mundo. Cada ciudad recibe una puntuación basada en 30 factores cualitativos y cuantitativos que evalúan 5 categorías: estabilidad, atención médica, cultura y medio ambiente, educación e infraestructura. Las puntuaciones se basan en puntos de datos externos, analistas internos y colaboradores locales. La categoría de estabilidad ha registrado el mayor declive, a medida que aumentaron las protestas y los conflictos armados. En el fondo de la lista, la ciudad de Damasco, Siria, sigue siendo clasificada como la ciudad menos habitable en la encuesta, seguida por Trípoli, Libia, reflejando una grave inestabilidad.
Apartamento 43 / cli·ma arquitectura. Image Cortesía de cli·ma arquitectura
Frente a las diversas formas de habitar que caracterizan a las sociedades contemporáneas y su grado de adaptabilidad a futuros usos en la arquitectura, la figura de los altillos representa una oportunidad para diseñar desde espacios de almacenamiento y guardado hasta concebir espacios de estar, estudio, ocio o mismo de descanso tanto para sus habitantes como también para sus posibles visitas. Dependiendo de sus escalas, tamaños y proporciones, estos espacios en altura permiten sacar provecho de los ambientes interiores en los apartamentos que, en algunas ocasiones, carecen de un metraje suficiente para realizar este tipo de funciones a nivel y disponen de determinada altura para poder realizarse.
Costa Amalfitana. Foto de Raghu Nayyar na Unsplash.
Vivir en ciudades construidas sobre laderas geográficas es una experiencia única y desafiante. Si bien estas áreas pueden ofrecer vistas panorámicas y paisajes impresionantes, por otro lado, la topografía empinada presenta una serie de desafíos en términos de planificación urbana, seguridad estructural y riesgos socioambientales. Estas ciudades requieren cuidados y soluciones especiales en el diseño de calles, edificios e infraestructuras, así como la comprensión de que, por razones de seguridad ambiental y de la población, no todas las áreas deben ser ocupadas.
La crisis mundial de la vivienda genera una amplia gama de desafíos, que van desde la falta de vivienda hasta la realidad de millones de personas que enfrentan condiciones de vivienda precarias, hacinamiento y alquileres excesivamente altos. Enfrentarlo implica voluntad política, la unión del Estado y la iniciativa privada, pero principalmente soluciones innovadoras que prioricen la accesibilidad, la sostenibilidad y mecanismos gubernamentales que lo permitan. Una cosa es segura: necesitamos construir masivamente en el futuro para mejorar esta situación. La implementación de métodos de construcción eficientes, como la prefabricación y la construcción modular, puede acelerar la creación de unidades de vivienda asequibles al reducir los costos y plazos de construcción y la adopción de prácticas de construcción respetuosas con el medio ambiente, como el uso de materiales reciclados y el diseño de estructuras energéticamente eficientes, no solo contribuyendo a la sostenibilidad. pero minimizando los gastos operativos a largo plazo para los residentes.
Hacer más con menos es una cuestión arquitectónica urgente. Más aún si pensamos en el contexto donde se superponen las crisis económicas y sociales a las cuestiones ambientales. La oficina Branco Del Rio Arquitectos viene desarrollando su práctica desde que fue fundada en 2014, en la ciudad de Coimbra, Portugal. Nacida en un período de inestabilidad, la firma es el resultado de la búsqueda de Paula del Rio y João Branco por una arquitectura simple que busca responder a las demandas impuestas de la forma más objetiva posible.
En menos de diez años, la oficina colecciona premios en concursos, reconocimientos internacionales y, recientemente, fue seleccionada como una de las mejores Nuevas Prácticas de ArchDaily de 2023. Tuvimos la oportunidad de conversar con los arquitectos sobre su experiencia con rehabilitaciones, sus proyectos de vivienda colectiva y su práctica caracterizada por la economía de medios.
Se dice que nuestra capacidad como especie para establecer fácilmente fuertes vínculos emocionales con criaturas de otra especie es una de las características únicas que diferencian a los humanos de los animales. Pero, ¿qué pasa con el amor que recibimos a cambio? Los científicos han llegado incluso a medir y comparar la presión sanguínea y los niveles de oxitocina de nuestras mascotas cuando estamos juntos y cuando estamos separados, para demostrar este hecho.
Con el amor familiar recíproco que se comparte entre mascotas y dueños, casi como entre los propios miembros de una familia, no es de extrañar que nuestras mascotas se sientan parte de nuestras familias. Pero, ¿por qué, entonces, somos menos propensos a incluirlos en las principales decisiones de diseño de nuestros hogares?
El interés por el co-living se encuentra en aumento, una dirección enfatizada por la fusión entre el operador de co-living más grande de los Estados Unidos, Common, y su equivalente europeo, Habyt. Según informa The Wall Street Journal, ambas empresas administran más de 4.000 apartamentos en Estados Unidos y 7.000 en Europa y Asia. El término co-living se refiere a una forma moderna de vivienda grupal donde los residentes comparten diversos espacios comunes para sociabilizar, cocinar y reunirse, y a su vez, cuentan con acceso a servicios compartidos como los servicios de limpieza o paseos para perros.
Figura 3. Collage urbano residencial sobre la propuesta “Penang Green Spine” . Image Cortesía de Revista Dearq
Este artículo de Miguel Paredes Maldonado fue publicado originalmente con el título "Casa, ciudad, territorio: Una investigación colectiva sobre las transformaciones del habitar urbano contemporáneo" en el número 31° de la revista Dearq el 01 de septiembre de 2021 (DOI: https://doi.org/10.18389/dearq31.2021.02).
El artículo explora las relaciones interescalares establecidas en tiempos recientes entre el dominio doméstico de la vivienda y los ámbitos colectivos de la ciudad y el territorio, desde la óptica del desarrollo de nuevos “comunes urbanos”. Dicha exploración se formaliza como una investigación colectiva, basada en la participación en concursos de arquitectura y elaborada en el contexto docente de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido) entre septiembre y diciembre de 2020. Sus resultados ponen en relieve el pronunciado sustrato infraestructural del habitar urbano contemporáneo e identifican los principales procesos de transferencia entre los dominios de lo doméstico y lo colectivo dentro de una serie de escenarios de habitación urbana.
A continuación, lo presentamos como parte de una colaboración conjunta para contribuir a la difusión de investigaciones, análisis y opiniones que la comunidad académica nacional e internacional elabora sobre la arquitectura, los temas de la ciudad y las áreas relacionadas.
Dedicado a las familias afectadas por los desastres naturales y a aquellas que habitan en zonas de laderas a la espera de alternativas o cambios en su hábitat.
Las laderas son como un manto que nos rodea, pero de una forma sesgada. La neblina limeña excusa a ese olvido. Hablar de habitar las laderas puede ser todavía sinónimo de no-habitable por las malas condiciones en que se encuentran tantas viviendas vulnerables pertenecientes al 70% de autoconstrucción en la ciudad. Sin embargo, las laderas, por su condición geográfica ofrecen cualidades habitables que hay que re-conocer y re-pensar para poder emplazarnos con sabiduría en el territorio, y así re-habitar con nuevos aires. No todas las viviendas autoconstruidas son “sin conocimiento”, algunas de ellas tienen lecciones propias. Otras, en su mayoría, no. La verdad es que es un terreno aún por seguir explorando.
Paradójicamente, los proyectos más interiorizados con su país trascienden las fronteras. Pues, precisamente, su trabajo de conexión interna y de introspección con las tradiciones de las comunidades más antiguas y recónditas, los lleva a buscar más conexiones y resonancias fuera de los límites. Este viaje adentro-afuera nos concierne a todos, veamos por qué...
El proyecto "A través de las selvas del mundo", de la asociación peruana sin fines de lucro Construye Identidad, es un trabajo multidisciplinar que viene desarrollándose hace más de un año en las comunidades de la selva peruana de Junín, documentando los desafíos que enfrenta la arquitectura vernácula y el habitar de la selva, en la era de la globalización y cambio climático.
Ahora se ha dado inicio a la siguiente etapa, donde el equipo viajará a lo largo de la Franja Climática Tropical del mundo para visitar las selvas de cuatro continentes, un país por continente: Indonesia, Camerún, Honduras y Perú. Estos fueron seleccionados en base a similitud de características tanto geográficas como demográficas, desafíos económicos y riqueza cultural; con el fin de mostrar las problemáticas compartidas a lo largo de los bosques tropicales del mundo.
El dibujo ofrece la posibilidad de conectarse con los más variados espacios de nuestras ciudades y con lo que allí ocurre.
Esta práctica, muy común entre los estudiantes de arquitectura, y también ilustradores, diseñadores y aficionados, es la que recoge en su más reciente libro el arquitecto y profesor de la Escuela de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Católica de Valparaíso, David Jolly Monge.
Titulado “La Observación: el urbanismo desde el acto de habitar”, este libro es presentado por su autor como “una colección de observaciones que dicen desde la detención que provoca dibujar un croquis: Qué es habitar”, según señala a Plataforma Urbana.